Desde tiempos inmemoriales
parece haberse malogrado la idea
para echar a correr los sueños,
los sueños llegaron amordazados
y de ahí,
todo marginó la vida
la esquina abierta donde
se cruzan los cuatro vientos,
despeinar cabellos,
levantar faldas y toldos
o juntar hojitas y tejer tapetes
cualquier cosa, menos tú
cualquier cosa, menos yo
tras la celda de algún ojo deforme
que no conozca la libertad
como único aire respirable.
IRMA P.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
"Toda crítica verdadera es un acto de amor".